Morandé Wine Group cuenta actualmente con diez campos que se ubican en cinco prestigiosos valles vitivinícolas de nuestro país. Ello nos permite tener viñedos tanto en zonas de clima frío, cercanos a la costa y a los pies de la cordillera de los Andes, como en climas cálidos. Estas propiedades presentan una gran diversidad de suelos, desde aluviales hasta volcánicos, graníticos y arcillosos, y distintos tipos de plantaciones, las que entregan calidades para todos los gustos.
Valle de Casablanca
Fuimos los primeros en creer en su potencial y no nos equivocamos. Hoy Casablanca es uno de los valles más reconocidos a nivel internacional por la calidad de sus vinos. Su principal característica es que recibe una importante influencia marítima, con nieblas matinales que penetran desde el Océano Pacífico y actúan como moderadoras de las temperaturas de verano. Ello favorece el óptimo desarrollo de los viñedos, pero exige cuidados especiales para alcanzar las madureces deseadas.
En Casablanca contamos con dos propiedades: Belén y El Principal. En la primera cultivamos mayormente chardonnay, pinot noir y algunas variedades tintas como syrah y cabernet franc. Y en El Principal, ubicado en una zona más fría, los viñedos son mayormente de sauvignon blanc, gewürztraminer y riesling. Contamos con más de 130 hectáreas plantadas. Los viñedos cuentan con una densidad de 10.101 plantas por hectárea, con una distancia de plantación de 1,5 metros entre hilera y 0,66 metros sobre la misma.
Valle del Maipo
Este es el valle de mayor tradición vitivinícola en Chile. Posee un clima mediterráneo templado, con veranos secos y calurosos. Sus suelos, de origen aluvial, pedregosos, de buen drenaje y fertilidad media, así como sus condiciones climáticas, favorecen al desarrollo de grandes vinos tintos, principalmente de cabernet sauvignon.
En Maipo disponemos de tres campos: Romeral, San Bernardo y El Puntal, este último ubicado en Isla de Maipo. Nuestro campo Romeral cuenta con más de 50 hectáreas, todas plantadas bajo el concepto de alta densidad, desde 6.944 a 10.101 plantas por hectárea. La parte más baja del campo se encuentra en la ribera misma del río, de modo que se trata de un suelo pobre, muy pedregoso y con excelente drenaje.
Nuestro campo San Bernardo cuenta con más de 50 hectáreas y se ubica en la comuna del mismo nombre, a los pies del cerro Chena, en pleno corazón del Valle del Maipo. Fue plantado en 1997 en alta densidad, a razón de 7.000 plantas por hectárea, conducido en espaldera vertical y orientado de norte a sur 22,5° oeste. Se sitúa en la tercera terraza aluvial del río Maipo, que se caracteriza por un horizonte de gravas y arcillas, que en gran medida es determinante para la calidad de los grandes vinos del Maipo, y por una estructura franca, que facilita un profundo desarrollo de las raíces.
Valle del Cachapoal
El Valle del Cachapoal, junto al de Colchagua, integran lo que técnicamente se denomina Valle de Rapel. Su clima es mediterráneo templado y un poco más húmedo que el de su vecino valle del Maipo. En Cachapoal se ubica nuestro campo La Moralina, que comprende más de 27 hectáreas de viñedos ubicados en el sector cordillerano. Al estar en el piemonte andino, las plantas reciben agua directamente de los deshielos de la cordillera.
Durante los días de primavera y verano se genera una gran amplitud térmica, suavizada por las constantes brisas que refrescan las parras y las protegen de las altas temperaturas. La mayor parte de sus suelos son profundos a moderadamente profundos, pero también posee sectores de suelos más delgados. Estos presentan un subsuelo compacto y un perfil de abundantes piedras angulosas y de cantos suavizados de origen aluvio-coluvial y de composición andesítica y de granito.
Valle del Maule
En este valle, las lluvias se concentran en invierno y las temperaturas tienden a ser un poco más bajas, aunque alcanzan una gran amplitud térmica entre el día y la noche. Sus suelos son muy variados, desde aluviales y volcánico a graníticos. Morandé Wine Group dispone de tres campos en este valle, sumando más de 300 hectáreas. Melozal y Pencahue se destacan por tener una gran cantidad de antiguos viñedos de país y carignan, los que mantienen las características de una viticultura heredada de los conquistadores españoles.
Es decir, viñedos podados en cabeza y plantados en baja densidad, perfectamente adaptados a este clima seco y cálido en verano y a sus suelos de origen granítico y de arcillas rojas. Allí también se ubican otros viñedos de variedades más clásicas, destinados a diferentes tipos de producción. Por su parte, el campo Yerbas Buenas, ubicado en la zona precordillerana del Maule, se destaca por la calidad de sus vinos blancos, frutales y frescos, que provienen de sus suelos aluviales y su clima de influencia andina.
Valle de Itata
En Itata, nuestros viñedos se encuentran enclavados en la Cordillera de la Costa. Esta se caracteriza por sus suaves colinas de granito, cuyos suelos tienen una alta presencia de cuarzo en todo su perfil. Su clima templado nos da la posibilidad de experimentar e innovar con variedades francesas, italianas y españolas adaptadas a las características del Secano Interior de este valle. El campo Ránquil comprende más de 20 hectáreas de viñas centenarias, plantadas en sus quebradas con múltiples exposiciones. Allí contamos con viñedos de cepa País y Cabernet Sauvignon de más de 80 años, los que nos han sorprendido por su pureza varietal, especialmente la del cabernet, que muestra gran carácter y elegancia.